Expectativas sobre la web2.0
Hace varios meses, Aníbal de la Torre publicaba una encuesta en su blog en la que preguntaba ‘¿Realmente la Web 2.0 está aportando lo esperado al mundo educativo?’. La Escuela 2.0, una de las iniciativas del Gobierno enmarcadas en el Plan de Estimulación de la economía, vuelve a poner de actualidad esta cuestión.
La última vez que revisé los resultados, sobre cuatro posibles opciones, el 41% opinaba ‘No, los docentes no estamos preparados para ello’; el 24% decía que ‘Sí, está aportando mucho’, otro 21% ‘No, porque es muy poca la penetración’ y el 14% opinaba que ‘No, mucho artificio y poca utilidad’.
Yo ya emití mi propio voto, y es que los docentes no estamos preparados para ello.
¿Y tu que opinas?
imagen | polizone con licencia Creative Commons
Yo también opino que los docentes no estamos preparados pero además pienso que el problema es de corte estructural y creo que la administración lo sabe y por eso actúa inundando las casas de los alumnos de equipos (amén de otras motivaciones menos honorables relacionadas con el voto de los papás). El profesorado no está por la labor de formarse porque tiene una conciencia profesional que da pena y no hay actitud ni curiosidad. La administración que lo sabe crea un sutnami irresistible: dotaciones para todos los alumnos de 5º de Primaria a 2º de ESO; se genera expectación y presión de los padres, más bien madres; ergo el profesorado no tiene más remedio que usarlo. Bien es cierto que esta dinámica hará que profes que antes no usaban las tIC, ahora las usen. Otra cosa es cómo las usarán y si estará justificado el sobreesfuerzo económico y de formación exprés que se está invirtiendo. Creo que esta política «tsunami» no es éticamente aceptable (se invierte a sabiendas de los efectos positivos serán mínimos), no tiene sustento científico, no se adecúa a los ritmos de cambio profesional del profesorado, no va acompasada de medidas de acompañamiento en centros que realmente sí serían eficaces,…
Me callo o me exilio.
Un abrazo David
Hola Antonio, creo que nos hemos acostumbrado a una administración que diseña los planes y los proyectos desde los despachos, sin tener en cuenta las auténticas necesidades de los destinatarios de dichos proyectos. Políticos y funcionarios hasta los que aún no se han filtrado ideas como las de ‘Eficiencia’, ‘Retorno de la Inversión’ o ‘Innovación Social’, es decir, la vieja máxima de «Todo para el pueblo, pero sin el pueblo» ya que, al fin de cuentas, ¿que importan unos cientos de miles de € más lanzados en las arcas de las mismas empresas (por cierto)?
No obstante, ni podemos exiliarnos (sobre todo por la inversión económica que nos supondría 😉 ni podemos callarnos (por la cuenta que nos trae como sociedad).
Un abrazo y gracias por aportar.