Herramientas

Desde hace varios meses Pinterest, un servicio que permite agrupar en murales imágenes recopiladas de la red o subidas por el usuario desde su propio equipo, se ha convertido en la nueva red social de moda.

Estas imágenes [Pin es el nombre que a cada imagen publicada le dan en Pinterest] se agrupan en murales o corchos virtuales [Board] y pueden ser a su vez compartidos por los seguidores del mural en sus propios murales. También se pueden marcar como ‘ favoritos’ [Like] y se pueden comentar.

Aparentemente nada nuevo bajo el sol, ya que recuerda mucho en sus funcionalidades a Scoop.it con la gran diferencia de que este último servicio no se limita a imágenes, sino que además puedes compartir enlaces a otros sitios web, artículos de blogs, pdf,…

No obstante, por su atractivo visual y pensando en el uso en el aula, este servicio puede ser de gran utilidad para convertir al alumnado en curators ya que además permite el trabajo de varios autores sobre un mismo mural o tablero.

Sin embargo hace varias semanas saltó en la red la alarma al respecto de las condiciones de uso del servicio, según las cuales cada usuario reconoce y acepta que es el único y exclusivo propietario de todos los contenidos que se ponen a disposición a través de la web o que tiene los derechos sobre esos contenidos, lo cual es bastante improbable por la propia naturaleza del mismo.

El usuario da una licencia mundial a la empresa que hay tras este servicio, Cold Brew Labs, para realizar cualquier tipo de explotación, incluída la venta, de los contenidos colgados en sus tableros de Pinterest.

Aún más, el usuario al aceptar esos términos aceptaba costear todo los gastos derivados de cualquier demanda por propiedad intelectual contra Cold Brew Labs.

Multitud de páginas web y blogs colgaron un banner con el mensaje ‘Dear Pinterest, Please change your terms or I’m Leaving’, y la red se llenó de artículos y mensajes en redes sociales mostrando el malestar por estas condiciones de uso, hasta el punto de que la semana pasada Pinterest comunicaba mediante un correo electrónico a sus usuarios la modificación de los términos de uso.

Entre las novedades está la eliminación de la parte en la que Pinterest comunicaba de la posibilidad de vender los contenidos de los usuarios [algo que según la empresa nunca estuvo entre sus intenciones], mejorar los sistemas de denuncia para materiales que lesionen los derechos de autor y controlar los contenidos relacionados con la autolesión, como los que promovían la anorexia, algo por lo que también habían recibido muchas críticas.

Estas nuevas condiciones de uso serán efectivas a partir del 6 de abril.

Para ir abriendo boca te dejo un enlace a mi muro de Infografías Educativas, el muro Ideas para el Aula de Kate Goddard y un artículo de Larry Ferlazzo que incluye enlaces a varios tutoriales de Pinterest.