Me gusta la palabra «atmósfera» que utiliza Einstein para referirse a lo que hoy llamaríamos «entornos», condiciones, posibilidades, etc.
Sin embargo,aparte de la rabiosa actualidad de la frase, en la idea de «atmósfera» hay una connotación de clima favorecedor, estimulante, «oxigenador».
Algo que, más allá de las posibilidades tecnológicas actuales, tiene que ver con la capacidad empática y entusiasta del docente para promover con sus alumnos eso…, una buena atmósfera (en cierta jerga juvenil una «buena onda»)
Al menos es lo que a mí me sugiere la frase. Me la apunto. Gracias David.
PepeLuis2 agosto, 2010 at 7:47 pm
Me parece una decisión muy inteligente, como todo lo que viene de el. Es mejor crear un ambiente y facilitar las herramientas y los «caminos», que intentar enseñar temas, que ya no están actualizados, y menos del interés actual con los métodos casi caducos. Pienso yo.
No es por que lo diga Einstein (que también). ¡Es que funciona!
Pero, como Alejandro, creo que hay que detenerse en el concepto de atmósfera o entorno. No es algo que se ubique en un instituto o en un cole, no. Y que esté ligado al que enseña. Es algo que, más bien, pertenece al que aprende y le acompaña. Es decir, es móvil (otra vez aprendizaje expandido y m-learning). Es algo a lo que podemos contribuir, pero no nos pertenece.
Y es algo que no podemos hacer, ningún docente, solos, aislados.
Pero todavía más, creo. En esa atmósfera-entorno tienen que estar presentes los otros. Porque no aprendemos solos. No es una burbuja, no.
Einstein fue un gigante, claro! Y no sólo en física, claro. Pero podemos llegar más lejos que él. Partiendo, eso sí, de su gran afirmación. A hombros de gigantes, entonces. Porque creo que él contemplaba esa atmósfera-entorno de una manera distinta a la que hoy podemos nosotros poner en marcha.
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Me gusta la palabra «atmósfera» que utiliza Einstein para referirse a lo que hoy llamaríamos «entornos», condiciones, posibilidades, etc.
Sin embargo,aparte de la rabiosa actualidad de la frase, en la idea de «atmósfera» hay una connotación de clima favorecedor, estimulante, «oxigenador».
Algo que, más allá de las posibilidades tecnológicas actuales, tiene que ver con la capacidad empática y entusiasta del docente para promover con sus alumnos eso…, una buena atmósfera (en cierta jerga juvenil una «buena onda»)
Al menos es lo que a mí me sugiere la frase. Me la apunto. Gracias David.
Me parece una decisión muy inteligente, como todo lo que viene de el. Es mejor crear un ambiente y facilitar las herramientas y los «caminos», que intentar enseñar temas, que ya no están actualizados, y menos del interés actual con los métodos casi caducos. Pienso yo.
No es por que lo diga Einstein (que también). ¡Es que funciona!
Pero, como Alejandro, creo que hay que detenerse en el concepto de atmósfera o entorno. No es algo que se ubique en un instituto o en un cole, no. Y que esté ligado al que enseña. Es algo que, más bien, pertenece al que aprende y le acompaña. Es decir, es móvil (otra vez aprendizaje expandido y m-learning). Es algo a lo que podemos contribuir, pero no nos pertenece.
Y es algo que no podemos hacer, ningún docente, solos, aislados.
Pero todavía más, creo. En esa atmósfera-entorno tienen que estar presentes los otros. Porque no aprendemos solos. No es una burbuja, no.
Einstein fue un gigante, claro! Y no sólo en física, claro. Pero podemos llegar más lejos que él. Partiendo, eso sí, de su gran afirmación. A hombros de gigantes, entonces. Porque creo que él contemplaba esa atmósfera-entorno de una manera distinta a la que hoy podemos nosotros poner en marcha.